Análisis octavos de final Champions (Milan-Tottenham)

Por la falta de tiempo y la cercanía de los exámenes, publico hoy la entrada referente a la eliminatoria que enfrenta a Tottenham y Milan.

Para mí, esta es una de las eliminatorias más espectaculares de los octavos. El Tottenham está siendo una de las sensaciones de esta Champions, y el Milan tiene uno de los mejores ataques de Europa. Sólo con eso, ya se puede esperar una intensísima eliminatoria. Pasemos ya al análisis. Los Spurs se han mostrado como un conjunto muy difícil de vencer en su estadio, y han convertido White Hart Lane en un fortín (el Tottenham ha ganado sus cuatro partidos en casa marcando catorce goles y recibiendo solo dos). En cambio, el Milan no ha estado tan sólido en San Siro, donde ha empatado ante el Real Madrid y ha perdido con el Ajax.

Algo que difiere bastante entre los dos equipos es su estilo de juego. El Tottenham es un equipo capacitado tanto para jugar a la contra gracias a la rapidez de sus extremos como para dominar los partidos gracias a sus centrocampistas. El Milan, en cambio, no tiene la misma cantidad de jugadores de ese perfil en medio campo, y depende en exceso de Ibrahimovic, que en equipos así sí que está cómodo y consigue el objetivo de ser la referencia en ataque de su equipo (este año lleva ya 17 goles entre Liga y Champions, casi los mismos que el año pasado con el Barça en toda la temporada). En esta comparación de estilos, quería resaltar el envidiable centro del campo del que dispone Harry Redknapp. El medio campo ideal del Tottenham está formado por Huddlestone, Modric, Lennon, Bale (aunque no jugará la ida) y Van der Vaart. Lo bueno es que los cinco han rendido a gran nivel en Champions y han liderado a su equipo al primer puesto del “grupo de la muerte” del torneo. El Milan no tendrá a Pirlo por una lesión de rodilla que le dejará seis semanas fuera, así que no sería difícil que viéramos que al Milan le cuesta mucho fabricar fútbol en los dos partidos.

La delantera de los dos equipos es realmente potente, y disponen de múltiples opciones. Personalmente, creo que el Tottenham debería de jugar siempre con Defoe, para tener velocidad arriba y mantener a los cinco del centro del campo o en sus defecto, que Defoe juegue con Crouch o Pavlyuchenko para tener dos tipos diferentes de delanteros y multiplicar sus opciones ofensivas. En el Milan, Allegri suele poner a Robinho, Ibrahimovic y ahora Cassano, con lo que el ataque del Milan combina clase, fuerza, desborde y velocidad. Hay posibilidad de ver muchos goles. Por la altura que tienen los dos equipos, pueden ser peligrosos a balón parado.

En defensa, los dos equipos tienen mejores registros de goles recibidos en sus ligas que en la Champions, y en cierto modo es porque ninguno de los dos equipos tiene una línea defensiva definida por falta de efectivos fiables y por lesiones. Así que la debilidad defensiva es otro motivo para pensar que puede haber muchos goles en este cruce de octavos. Para mí, entre las dos defensas, sólo hay dos jugadores fiables: Thiago Silva y Gallas. Los laterales no tienen un gran nivel, así que las entradas por banda de los extremos pueden ayudar a que haya buenos balones a las áreas. Esta eliminatoria es ideal para Lennon y Bale (aunque este último no jugará la ida por problemas en la espalda), que por velocidad superan sobradamente a los laterales milanistas.

Las porterías no es que se sientan seguras, precisamente. Abbiati y Gomes son los guardametas de Milan y Tottenham, y está claro que con su irregularidad pueden contribuir a que los duelos entre londinenses y milaneses cuenten con muchos tantos.

En definitiva, mi opinión es que el Tottenham será quien se lleve la victoria final por tener un centro del campo que es infinitamente mejor que el del Milan. Es cierto que los rossoneros tienen muchísima pegada, y que sus delanteros pueden sacar ocasiones de la nada, pero está claro que tiene más posibilidades de hacer gol el equipo que más fácil lo haga, y el Tottenham está capacitado para ello con sus mediocampistas y extremos.